Historia

Alfredo da Silva, accionista de Companhia Aliança Fabril (CEF), promueve la fusión de esta empresa con CUF y avanza hacia la producción de fertilizantes a gran escala. También en esta fecha, la Fábrica Sol, ubicada en la Avenida 24 de Julho, en Lisboa, pasa a formar parte del patrimonio de la CUF.

Alfredo da Silva elige a Barreiro para seguir el fuerte ritmo de expansión de la CUF. El 19 de septiembre de 1908, se inauguró la primera fábrica en el pequeño pueblo pesquero de Lavradio y comenzó la producción de ácidos, transformando el aceite de orujo de oliva para la fabricación de jabones. Las fábricas emplean a unos 100 trabajadores. También en 1908, comenzó la construcción del Bairro Operário.

En los años treinta, CUF tenía fábricas en Lisboa, Barreiro, Alferrarede, Soure, Canas de Senhorim y Mirandela y empleaba a 16.000 personas. El lema de la empresa, lanzado por Alfredo da Silva, era: «Lo que el país no tiene... lo crea la CUF».

Este lema fue confirmado por la evolución de la CUF, que añadió sectores a sus actividades. Tras iniciar las obras en el complejo industrial de Barreiro, entra en funcionamiento la primera planta de ácido sulfúrico y superfosfato para la producción de fertilizantes. El ciclo de crecimiento tiene lugar en cinco grandes segmentos de producción:

Química orgánica: en la refinación de aceites, aceite de oliva, jabones, harinas y piensos;

Química inorgánica: en la fabricación de ácidos;

Metalúrgico: con cobre, plomo, oro y plata y tratamiento de cenizas de pirita;

Metalurgia: con talleres de hierro y bronce y fabricación de acero especial para la industria del ácido sulfúrico;

Textil: primero con paquetes de fertilizantes y luego se extendió a la producción de varios tejidos.

En los años 70, el CUF alcanzó su punto máximo. Con más de cien empresas, más de mil productos diferentes, 110 mil empleados, que representan un total del 5% del Producto Interno Bruto nacional, CUF es el grupo económico más grande de la historia de Portugal.

En 1975, el mayor grupo empresarial privado de Portugal (CUF) fue nacionalizado y disuelto. Recién en 1997, cuando ya era miembro del Grupo José de Mello, volvería a utilizar el nombre CUF.

A finales de los 70, se creó el holding «José de Mello», con algunos de los antiguos propietarios de CUF como accionistas. El reingreso del grupo al sector químico se produce con la compra de Uniteca, una industria de producción de cloro-álcalis.

El Grupo José de Mello adquiere el control de Quimigal, lleva a cabo una profunda reestructuración de este grupo industrial químico y vuelve a adoptar el nombre CUF.

En 2006, el Grupo CUF emprendió un proceso de reestructuración empresarial con el objetivo de centrarse en su negocio principal, los productos químicos y los fertilizantes. También aprovecha la oportunidad para refrescar y actualizar su imagen corporativa.

En 2008, CUF vendió el negocio de fertilizantes y concentró todos sus recursos en la industria química, centrándose en el objetivo estratégico de convertirse en uno de los grupos químicos más grandes de la Península Ibérica. Ese mismo año, la CUF participó activamente en un amplio programa para celebrar el centenario de la CUF en Barreiro, que incluyó la producción de un documental, la restauración de películas antiguas, la publicación de sellos y libros, concursos, exposiciones y una conferencia internacional.

El 8 de julio de 2009, la CUF presentó públicamente la finalización del proyecto de expansión del Complejo Químico de Estarreja, llevado a cabo como parte de un Proyecto de Interés Nacional (PIN), un proyecto que es un hito importante para la economía nacional y para el desarrollo de la región. CUF invierte 125 millones de euros en este proyecto y duplica su capacidad de producción de anilina hasta alcanzar las 200.000 toneladas al año, de las cuales el 60% será consumido por su socio comercial, DOW. La finalización de esta expansión posiciona a CUF como una de las cinco primeras empresas del sector químico en operar en la Península Ibérica y al grupo José de Mello como uno de los más grandes de Europa, con tecnología propia.

En mayo de 2018, CUF cambió su identidad corporativa y adoptó una nueva marca llamada Bondalti. Fue la culminación de un proceso de reposicionamiento estratégico de la empresa, que entró en una fase de más crecimiento, más ambición, más innovación y más internacionalización. El reposicionamiento estratégico de la empresa reforzó su posición como el principal productor europeo no integrado de anilina y nitrobenceno, y también se tradujo en la adquisición de una unidad de fabricación en la región española de Cantabria, lo que creó las condiciones para una posición de liderazgo ibérico en el mercado del cloro. La nueva marca Bondalti destaca una fonética internacional de origen ibérico y permite un vínculo claro entre la palabra «Bond», que significa «conexión» en inglés, y «Alti», que se origina en latín y hace referencia a la elevación, la ambición y el liderazgo.

En noviembre de 2019, Bondalti comenzó a operar en su nueva unidad de fabricación en Torrelavega, en la región cantábrica del norte de España. Esta planta representa una inversión total de 60 millones de euros y posiciona a Bondalti como el principal productor del segmento de cloro-álcalis en la Península Ibérica. Con una capacidad instalada de 68.000 toneladas/año, esta unidad se centra en la producción de cloro, sosa cáustica, hidrógeno, ácido clorhídrico e hipoclorito de sodio, respondiendo a la demanda del mercado para la producción de poliuretanos y PVC, el tratamiento y la purificación del agua, la producción de textiles, pulpa de papel, aluminio, productos de limpieza y aplicaciones en la gran mayoría de los productos manufacturados.

En 2020, Bondalti ingresó al sector del tratamiento y reciclaje del agua, mediante la adquisición de una participación mayoritaria en Enkrott, una empresa líder en Portugal. La inclusión de esta nueva área de negocio fue un paso natural, teniendo en cuenta la experiencia adquirida en el ciclo del agua mediante la producción de cloro, esencial para garantizar la calidad del agua para el consumo humano y otros fines. Al mismo tiempo, reforzó la importante contribución de la empresa al logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Ese mismo año, Bondalti estableció una tercera vía de crecimiento: nuevos negocios en el contexto de la transición energética, centrados en el desarrollo de energías verdes, es decir, obtenidas de fuentes renovables. Tanto el litio como el hidrógeno se obtienen mediante procesos similares a la producción de cloro-álcali, el negocio principal de la empresa y en el que la empresa tiene una amplia experiencia. Esta nueva área se ha convertido en un pilar fundamental para alcanzar los objetivos de descarbonización de la empresa, es decir, la neutralidad de carbono para 2030 y la neutralidad climática para 2050.

En 2021, Bondalti refuerza significativamente su presencia en España y, específicamente, en el sector del tratamiento de agua, con la adquisición del 100% del capital del grupo Águas Alfaro (con el nombre comercial AEMA), uno de los principales operadores españoles, con una amplia experiencia en el segmento municipal.

En febrero de 2023, en una clara reafirmación de su vocación ibérica, Bondalti inauguró una delegación en Madrid, la séptima en territorio español, con el objetivo de establecer un puente entre las actividades del grupo en los dos países, en sus diferentes áreas de negocio.

En abril del mismo año, Bondalti presentó una nueva identidad visual, un cambio que refleja una etapa importante de su desarrollo estratégico, que implica el refuerzo de la internacionalización de las actividades y la entrada en nuevos proyectos en el campo de la descarbonización. Con este cambio, se adoptaron nuevas designaciones para las tres áreas de negocio en las que opera: Bondalti Chemistry (productos químicos industriales); Bondalti Water (tratamiento y reciclaje de agua) y Bondalti Energy (energía verde).